Un instalador del cable (Jim Carrey) llamado Ernie "Chip" Douglas atiende a Steven Kovacs (Matthew Broderick), que acaba de mudarse tras cortar con su novia Robin (Leslie Mann). Durante la instalación en la nueva casa Chip y Steven se llevan bien, y saliendo juntos crean una buena aunque curiosa amistad. Al principio todo va bien, y Steven vuelve con Robin, pero Chip se toma la amistad muy en serio, convirtiéndose en un neurótico acosador. Y, para desgracia de Steven, Chip cae bien a todos los de su círculo familiar, incluso a su novia a los cuales Chip logra manipular a tal punto que hace ver a Steven como un perfecto insoportable y a sí mismo como a la víctima de los arranques de ira de Steven.