La psiquiatra forense Cara Harding (Julianne Moore) es una especialista en destapar casos falsos de personalidad múltiple. Se ha refugiado en la profesión después de la pérdida de su marido, aunque también intenta educar con celo a su hija adolescente Samantha (Broolynn Proulx).
Ahora se encuentra investigando un nuevo caso a petición de su padre: el de un hombre lleno de misterios, David (Jonathan Rhys Meyers) que parece encajar a la perfección con el perfil de sus estudios. Sin embargo, el caso comenzará a convertirse en más complejo de lo que pensaba, hasta llegar a ser casi incomprensible y más cercano a lo sobrenatural de lo que ella está dispuesta a reconocer. David ha comenzado a adoptar otras personalidades de gente que murió hace mucho tiempo, lo que le llevará a investigar en un pasado plagado de turbiedad y en el que palpita una oscura trama de índole religiosa relacionada con los ritos satánicos