La aparente normalidad de una modesta casa de Tokio oculta el horror que se encuentra en su interior. La casa está poseída por una violenta plaga que destruye las vidas de todos que se encuentran en ella. Esta maldición hace que sus víctimas mueran poseídas por una ira poderosa. Cada muerte causada por la maldición provoca el nacimiento de una nueva víctima, lo que hace que se propague como un virus, creando una interminable y creciente cadena de terror. Karen (Sarah Michelle Gellar) es una estudiante norteamericana de intercambio en Japón, que se ve atrapada dentro de éste círculo mortal.